La lumbalgia en el embarazo la sufren más de la mitad de las mujeres que están en el tercer trimestre del embarazo.
La lumbalgia es el dolor local en la parte baja de la espalda, en la zona lumbar. Puede irradiarse a otras zonas, como las piernas, si afecta algún nervio.
Es un dolor que puede aparecer por diferentes motivos como, contracturas musculares, pinzamientos, hernias de disco, osteoporosis, artrosis... Es fácil sufrir una lumbalgia si adoptamos malas posturas en la vida diaria y durante la jornada laboral.
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Durante el embarazo la mujer sufre muchos cambios en su cuerpo. Entre ellos un aumento de la curvatura fisiológica lumbar. A finales del segundo trimestre y, sobretodo, en el tercero, el crecimiento de la barriga hace que esta curvatura normal se pronuncie más, provocando cambios en la columna lumbar. Este cambio puede aumentar el riesgo de contracturas, hernias o protusiones discales.
Si antes del embarazo no sufríamos lumbalgia, lo más probable es que una vez se tenga el bebé, desaparezca. En cambio, si ya sufrías lumbalgia antes del embarazo, puedes tener más complicaciones durante todo el proceso.
Si conoces a alguien que necesita un fisioterapeuta a domicilio, contacta con nosotros y te ayudamos a elegir el mejor.
RegaloSi tienes una lumbalgia en el embarazo que dura más de dos semanas deberás consultar con tu médico. Lo más probable es que te receten algún tipo de medicación antiinflamatoria y contra el dolor.
Como fisioterapeutas consideramos que el mejor tratamiento será la terapia manual y los ejercicios preventivos. Cuantos menos medicamentos tomes durante el embarazo mejor para tu bebé.
Puedes utilizar el mail, formulario, whatsapp, teléfono o gestionar tu reserva online.
Recopilamos todos los datos necesarios y confirmamos la visita con uno de nuestros fisioterapeutas.
El fisioterapeuta encargado de tu tratamiento acudirá a tu domicilio, llevamos todo lo necesario.
Intentaremos hacer estos ejercicios de forma diaria, en el momento que queramos. Pero para que sea útil tendríamos que hacerlo con o sin dolor lumbar. Si algún ejercicio es excesivamente molesto o hay algún riesgo lo dejaremos.
- Estirados boca arriba con las piernas flexionadas y los pies apoyados, levantaremos el culo y volveremos a bajar.
- En la misma posición que el ejercicio anterior, cogemos una rodilla y flexionales la pierna sobre el cuerpo, volvemos a la posición inicial y lo repetimos con la otra.
- Seguimos con la posición inicial, inclinamos las dos rodillas hacia un lado, aguantamos 5 segundos, recuperamos la posición inicial y repetimos hacia el otro lado.
- Sentada en el suelo sobre los talones, inclinamos el cuerpo hacia delante ayudándonos con los brazos.
- En el suelo en cuadrupedia, hacemos el movimiento típico del gato, levantamos la columna hacia el techo.
Si necesitas algún tratamiento por dolor de columna durante el embarazo, contacta con nosotros, uno de nuestros fisioterapeutas a domicilio acudirá y te pautará el tratamiento y los ejercicios más adecuados.