El tratamiento con fisioterapia respiratoria en EPOC es uno de los tratamientos no farmacológicos más eficaces en el tratamiento de las EPOC (enfermedades pulmonares obstructivas crónicas)

La Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) es una de las enfermedades pulmonares más comunes. La EPOC causa dificultades para respirar. Hay dos tipos principales de EPOC:

• Bronquitis crónica, que causa una tos prolongada con moco.
• Enfisema, que provoca un daño a los pulmones con el tiempo.

La mayor parte de las personas que sufren EPOC tienen una combinación de ambas afecciones.

El tratamiento de fisioterapia pulmonar en EPOC tiene dos funciones principales:

• Mejorar la ventilación pulmonar.
• Eliminar secreciones.

Para mejorar la ventilación pulmonar el fisioterapeuta respiratorio enseñará una serie de ejercicios respiratorios enfocados a mejorar el aporte de oxígeno a las distintas zonas del pulmón, con la finalidad de que el pulmón trabaje al máximo de su capacidad y que permita al paciente realizar las actividades de la vida diaria (AVD) de la forma más autónoma posible. Estos ejercicios se deberán hacer con la ayuda del fisioterapeuta, familiar, cuidador o simplemente el mismo paciente. Y se podrán utilizar o no ayudas de aparatos mecánicos para su realización.

Para eliminar secreciones el fisioterapeuta puede enseñar al paciente a realizar maniobras que ayuden a hacerlo solo o realizará, el mismo fisioterapeuta, maniobras manuales enfocadas a eliminar ese exceso de secreciones en momentos más agudos o en los que el propio paciente no tenga fuerza para hacerlo. Esto ayudará a evitar que un simple resfriado nos lleve a patologías más graves causadas por el exceso de mucosidad.

Es obvio que el principal consejo será evitar o dejar de fumar y alejarse de zonas con contaminación alta, muy perjudiciales para estos pacientes.

Los ejercicios que se enseñen no se harán sólo en las sesiones de fisioterapia torácica, sino que se animará al paciente a realizarlos por si mismo o con la ayuda de algún familiar o cuidador a diario, con 15-20 minutos puede ser suficiente. Los ejercicios no son una terapia para momentos agudos de la enfermedad sino que son una forma de prevención de futuras recaídas y para mejorar el estado general del paciente.

Aconsejamos que cuando haya un episodio de exceso de mucosidad acudan o llamen a su fisioterapeuta de confianza para que les ayude a su eliminación. Simplemente con esto pueden evitar males mayores, como infecciones, ingresos hospitalarios...