Tratamiento de fisioterapia
La fisioterapia es la ciencia de la salud encargada de restablecer el correcto funcionamiento del aparato locomotor después de un traumatismo o patología asociada.
El tratamiento de fisioterapia en lesiones de traumatología llevados por un fisioterapeuta a domicilio puede verse o no afectado el sistema óseo.
Los huesos son órganos pasivos del aparato locomotor, cumplen varias funciones como soportar el cuerpo, proteger órganos y colaboran en la producción de los compuestos de la sangre.
En la medula ósea se fabrican cada día glóbulos rojos, blancos y plaquetas.

Lesiones del sistema óseo:
En los tratamientos de rehabilitación a domicilio, los fisioterapeutas suelen tratar varias alteraciones del sistema óseo, como:
- Anquilosis o rigidez articular: es la reducción de los movimientos naturales de una articulación, por la limitación o daño en las cabezas oseas de esa articulación.
- Artritis: es un proceso degenerativo de la articulación, caracterizado por lesiones inflamatorias de la membrana sinovial que se encuentra en el interior de la cavidad articular. Puede producir limitación del movimiento, deformación articular y mucho dolor.
- Artrosis: Es el desgaste producido en las articulaciones, de carácter degenerativo, que produce dolor y limitación funcional.
- Bursitis: es una inflación aguda, con formación de líquido en pequeñas bolsas serosas, que se encuentran por debajo de los tendones sobre el plano óseo subyacente.
- Escoliosis: es la desviación lateral de la columna vertebral, normalmente se generan dos curvas, una para compensar la otra. La columna adquiere forma de S.
- Fractura: es la rotura de un hueso a causa de un traumatismo o por desgaste del mismo.
- Gota: es un tipo de reumatismo caracterizado por la acumulación de ácido úrico en las articulaciones. La más común es la del dedo gordo del pie.
Objetivos del tratamiento de fisioterapia:
Los tratamientos de fisioterapia en las lesiones óseas variarán en función de la patología, los objetivos generales serán:
- Aliviar el dolor.
- Mejorar la movilidad.
- Reducir la inflamación.
- Consolidar el callo óseo.
- Estabilizar la articulación potenciando la musculatura.
- Preparar al paciente para volver a realizar las actividades de la vida diaria de forma natural.
Los objetivos variaran en función del paciente y de la patología, el fisioterapeuta deberá pautar el tratamiento más adecuado en cada situación.